¿Con qué frecuencia puedo visitar los Estados Unidos como visitante de la Visa B-1 o B-2 y cuánto tiempo puedo quedarme en cada visita?

Es una práctica común y practica mal entendido que un visitante de los Estados Unidos se quede por 6 meses, y después salga de los Estados Unidos y vuelva a entrar al día siguiente para permanecer en los Estados Unidos por otros 6 meses. Aunque esto sea común y es posible que el visitante aún no haya tenido ningún problema en la frontera, no se recomienda.

Vea a continuación una explicación de situaciones comunes de visitantes y cuales elementos pueden presentar ser un riesgo que demuestre ser una “intención de inmigrante”, lo cual puede ser una base para rechazar su entrada, lo que después puede afectar los intentos de cruzar a los Estados Unidos.

Las estadías a corto plazo que van desde unos pocos días hasta varias semanas, que duran durante el año, generalmente plantean riesgos bajos de que se considere que un visitante tiene “intención de inmigrante”. Es una buena idea preparar un itinerario detallado que incluya su vuelo de regreso a su país de origen y explicar claramente el propósito del viaje (visita a amigos, familia, reunión de negocios, etc.)

Los visitantes que deseen quedarse para visitas a largo plazo que abarquen varios meses deben estar preparados para responder preguntas sobre sus vínculos con su país de origen (empleo, educación, residencia, etc.) y explicar el motivo de su estadía más tiempo de lo habitual, como su itinerario, detalles sobre la ocasión a la que asiste en los Estados Unidos o la familia y/o los amigos que está visitando. Si el tiempo que pasa en su país de origen parece más significativo que sus viajes a los Estados Unidos, los riesgos son menores de que se le cuestione si está tratando o no de “vivir” prácticamente en los Estados Unidos, lo cual no está permitido con una visa de visitante.

Es arriesgado acumular un registro de viaje que muestre que un visitante ha permanecido muchos meses en los Estados Unidos, se fue por poco tiempo y volvió a ingresar a los Estados Unidos para quedarse varios meses más. Esto se debe a que puede darle al oficial una razón para sospechar que usted es en realidad un residente “de facto” de los Estados Unidos. Incluso si cumple con todos los demás requisitos, como no participar en ningún trabajo sin autorización en los Estados Unidos, si pasa la mayor de su tiempo en los Estados Unidos sin evidencia suficiente un oficial examinador puede negarle la entrada en su próxima visita sobre la base de que sospecha que está tratando de vivir “prácticamente” en los Estados Unidos, según su historial de viajes.

Si usted es titular de una visa B1/B2 y tiene una razón válida para quedarse por más de 6 meses, por ejemplo, para acompañar a su hijo que está estudiando en los Estados Unidos con una visa F-1, se recomienda una estrategia diferente. En lugar de hacer una salida a corto plazo del país e intentar a volver a ingresar para obtener el estatus de visitante por otros 6 meses, puede ser más sencillo solicitar una extensión de su estatus de visitante a USCIS desde dentro de los Estados Unidos.

Las personas de los países con la exención de visa que ingresan a los Estados Unidos con una ESTA tienen una estadía máxima de solo 90 días y no pueden solicitar la extensión de su estatus desde dentro de los Estados Unidos.

Los visitantes también deben tener en cuenta que los viajes a corto plazo de 30 días o menos a Canadá o México no “interrumpen” su período de estadía en los Estados Unidos. Esto significa que viajar a corto plazo a Canadá o México no creará una nueva admisión cuando vuelva a ingresar a los Estados Unidos, por lo que no “reprogramará” el reloj para su estadía autorizada.